Importancia de los procedimientos estéticos para la salud de la piel
Sentirse bien con uno mismo es fundamental y va más allá de la estética. La salud de la piel está estrechamente relacionada con este aspecto.
La búsqueda de aceptación y conformidad con el propio cuerpo tiene raíces profundas en la historia de la humanidad. Desde las culturas antiguas, como la griega, la mesopotámica, la egipcia y la china; la estética y la imagen corporal han desempeñado papeles cruciales. Los artistas del renacimiento y la cultura de las celebridades del siglo XX también reflejaron la representación de la belleza.
Aunque los estándares de belleza y las actitudes hacia nuestros cuerpos han variado a lo largo del tiempo y de acuerdo a cada cultura, la preocupación por la apariencia y el deseo de sentirse bien consigo mismo son temas recurrentes en nuestra vida.
No es necesario buscar demasiado lejos; es probable que algún amigo, un miembro de tu familia o incluso tú mismo hayas realizado algún tipo de procedimiento estético.
Sin embargo, se equivoca quien piensa que los procedimientos estéticos son solo para “embellecer” o corregir imperfecciones corporales. En realidad, van mucho más allá de eso.
La salud de la piel: el principal objetivo de los procedimientos estéticos
Los procedimientos estéticos se enfocan en la salud de la piel, y como consecuencia evidente, se genera una mejora en su apariencia.
El mayor órgano del cuerpo humano desempeña un sinnúmero de funciones esenciales. Es nuestra primera barrera contra virus, bacterias y otros agentes, la primera capa de regulación de la temperatura y por donde eliminamos toxinas a través de la transpiración. Si algo no está funcionando bien en el organismo, probablemente eso se refleje en la piel.
Precisamente por eso, además de proteger el cuerpo, una piel saludable es un reflejo de la salud física y mental. Por otro lado, problemas de piel como el acné, las arrugas y las manchas pueden afectar negativamente la autoestima y, en consecuencia, la calidad de vida.
El relleno con ácido hialurónico, el ultrasonido microfocalizado y la bioestimulación de colágeno son algunos ejemplos de cómo los procedimientos estéticos actúan en la salud de la piel.
“Todo lo que usamos, desde los productos de cuidado diario de la piel hasta nuestras tecnologías y los inyectables en la consulta, son herramientas para restaurar la salud y las funciones que la piel va perdiendo con el tiempo debido al envejecimiento y las agresiones causadas por factores externos”, explica la dermatóloga Bianca Viscomi (CRM-SP 116.663), especialista en cirugía dermatológica y láser por la Sociedad Brasileña de Cirugía Dermatológica.
Por eso, al buscar procedimientos que mejoren la salud de la piel, estás avanzando hacia una vida más saludable; y, el primer paso es encontrar a un profesional cualificado.
Una piel saludable y bonita
Gran parte de las recientes innovaciones en procedimientos estéticos tienen un objetivo común: asegurar una buena calidad en la piel.
Como menciona la Dra. Bianca, esto es algo palpable y existen criterios precisos que definen este parámetro. “Son cuatro atributos: textura, glow o luminosidad, que hace referencia a la forma en que la piel refleja la luz, uniformidad de la pigmentación y, por último, firmeza”, explica.
Mediante la evaluación de estas características, el dermatólogo puede determinar la calidad de la piel. Por este motivo, un profesional enfocado en la salud de la piel es la persona indicada para examinar estas condiciones de la piel y entender de manera mucho más amplia cómo cuidarla. Este es el primer y más crucial paso que se puede tomar.
“Lo más interesante es que cuando proponemos herramientas para tratar estos cuatro atributos, nos damos cuenta de que, en realidad, lo que estamos buscando es una piel saludable”, completa la dermatóloga.
La evolución de los procedimientos estéticos
La tecnología ha avanzado bastante en los últimos años, y su aplicación en la estética ha sido exponencial. Los procedimientos se han vuelto cada vez más seguros, eficaces e incluso accesibles.
Gracias a las investigaciones continuas en el campo de la dermatología estética, los enfoques de los profesionales se han vuelto altamente personalizados, considerando cada caso, necesidad y tipo de piel de manera individual. Este enfoque personalizado se refleja tanto en los procedimientos más superficiales como en aquellos que requieren una intervención más profunda.
La Dra. Bianca cita como ejemplo la utilización de algunos inyectables. Según la dermatóloga, hace algún tiempo, los especialistas desconocían los mecanismos de acción de estas sustancias para favorecer una piel en óptimas condiciones.
Por ejemplo, la toxina botulínica intradérmica no solo trata las arrugas, sino que también mejora el tamaño de los poros y, en consecuencia, la salud de la piel. Además, se emplea en diversas afecciones como la hipersecreción sebácea, la rosácea y en pacientes con sudoración excesiva en el rostro. “Su utilidad va mucho más allá de la estética”, afirma Bianca.
Un punto muy interesante de este nuevo enfoque, según la dermatóloga, es la preparación previa de la piel. “Esto asegura una base más sólida y garantiza resultados más naturales“, comenta la especialista. En otras palabras, el paciente se somete al procedimiento sin que se note su intervención.
Además, la necesidad de futuros rellenos será reducida. “Hoy en día, tenemos una perspectiva diferente del rostro. Todos nuestros esfuerzos se centran en tener una piel saludable, lo que naturalmente se traduce en una piel más hermosa”.
Cuidados de la piel a lo largo de la vida
Es crucial comprender la importancia de cuidar la piel desde una edad temprana y entender cómo los procedimientos estéticos contribuyen a mejorar la apariencia y salud de la piel, contrarrestando los efectos del envejecimiento.
Existen acciones preventivas que se pueden implementar desde jóvenes, como el uso adecuado de protección solar, la adopción de una rutina de cuidado de la piel, la práctica de un estilo de vida saludable y, en algunos casos, la consideración de procedimientos estéticos.
Algunos procedimientos estéticos son efectivos para prevenir problemas futuros como la formación de arrugas y la pérdida de firmeza en la piel, y pueden integrarse en un plan de cuidado a largo plazo.
El bioestimulador de colágeno inyectable, y un dispositivo de ultrasonido microfocalizado, por ejemplo, estimulan la producción de colágeno, reduciendo la flacidez y mejorando la elasticidad de la piel.
El colágeno es una proteína esencial para mantener la piel firme, elástica y saludable. Con el paso del tiempo, la producción de colágeno disminuye, lo que conlleva a la aparición de arrugas y flacidez. Estimular la producción de colágeno puede mejorar la firmeza y salud de la piel.
Procedimientos como el uso de toxina botulínica y rellenos dérmicos pueden emplearse para relajar los músculos faciales y rellenar áreas con arrugas y líneas finas, logrando una piel más suave y rejuvenecida. Por ejemplo, un relleno a base de ácido hialurónico, suaviza la apariencia de arrugas superficiales, remodelando y alisando surcos profundos en el rostro.
Los peelings químicos, la terapia láser y los tratamientos de luz intensa pulsada también tienen como objetivo aclarar manchas y tratar la hiperpigmentación, comunes en el proceso de envejecimiento. Esto no solo mejora la apariencia de la piel, sino que también fomenta su salud, reduciendo los riesgos asociados a los daños por el sol.
En resumen, la salud de la piel depende de una combinación de factores intrínsecos y extrínsecos que afectan su funcionamiento y apariencia a lo largo del tiempo. Sin embargo, incluso el envejecimiento de la piel, siendo un proceso natural e inevitable, puede ser retardado al mantener la salud de este órgano tan importante para nosotros.
Mira cómo un especialista puede ayudarte: ¿Has considerado hablar con un dermatólogo para obtener más información sobre cómo cuidar tu piel?